El pasado 11 de Octubre hemos hecho 8 años de casados. No solemos ser de celebrar mucho estos temas (lo que no quiere decir que no nos cuidemos ni mucho menos, sino que no solemos darle mucha importancia a las fechas, mejor el día a día), pero esta vez nos apetecía hacer algo diferente.
Durante la semana decidimos darnos un capricho. La idea es un fin de semana de relax total en un hotel que nos parezca acogedor y sin más intención que relax. Tras unas horas de búsqueda, el hotel que más nos convence es el Hotel Boutique Maribel y lo que ya termina de convencer más es que está localizado en un pequeño precioso pueblo en Huesca: Alquezar. Miramos un poco y parece que tiene varias rutas de senderismo, así que al final también meteremos algo de andar el fin de semana.
El viernes después de comer, carretera y manta. Tenemos ya todo cargado en el coche, así que … camino a Huesca. Sobre las 6 de la tarde llegamos a Alquezar, y veremos en primera mano que las fotos que hemos visto en Internet no exageran para nada la belleza del pueblo.
y lo que tampoco nos defrauda sino más bien todo lo contrario, es el hotel.
El hotel tiene 9 habitaciones, cada una con nombre de las 9 uvas cosechadas en la Comarca del Somontano: Cabernet, Chardonnay, Garnacha, Macabeo, Merlot, Moristel, Moscatel, Parraleta y Tempranillo. En recepción nos dan la llave de la que será nuestra habitación, la de nombre Merlot.
¡Bienvenidos! 😉
Pequeña sala de estar
Baño super completo
con pedazo jacuzzi para 2 personas en él.
me da que llegó la hora de utilizar las sales que nos dieron en la Vuelta a Ibiza en BTT y que aún teníamos por ahí guardadas.. 😉
Y preciosa zona de cama
La decoración nos ha gustado muchísimo. El tema de ladrillos nos gusta desde siempre, y no es la primera vez ni será la última que hablamos de el día que paremos más por casa decorar parte de la sala con estos ladrillos.
No se si alguna de las otras habitaciones será más bonita, pero nos quedamos con las ganas de verlas una por una. ¡La Merlot nos ha gustado mucho!
Después de ver la habitación, habrá que salir a dar una vuelta al pueblo. Es muy chiquitito y está muy cuidado, y tiene mucha historia: Alquezar en la Wikipedia
Habrá que cenar algo.. Mañana nuestro plan es dar una vuelta a la mañana y luego ir a comer al restaurante familiar de los del hotel (está a unos 200 metros del hotel), así que hoy toca probar otro sitio.
Menú de 17€ en la Cocineta. Como siempre la menda quiere cerveza, pero bien es cierto que además de que el menú no permite elegir cerveza, estamos en tierra de vino, así que .. habrá que probarlo. Y no me arrepiento, no me suele gustar mucho el vino, pero … me encanta..
Con el buche lleno , toca ir a descansar.. que mañana llega pronto. 😉 ¡Buenas noches!
Sábado 15 de Octubre del 2016
A las 9 empiezan a dar el desayuno, así que poco después bajamos de la habitación y vamos a ver qué nos dan. Pensábamos que era buffet, no sé por qué se nos había metido eso en la cabeza, pero da igual, la comida que nos espera está exquisita. Nos van sacando en varias etapas. Jamón ibérico de bellota, increiblemente bueno. Tomate rosa de Barbastro con aceite del Somontano, queso de Radiquero
Media tortilla para los dos (cada día diferente, el sábado de trigueros y el domingo de patatas)
Tostadas (son grandes de narices, la foto no lo representa bien… y croissants. La mermelada que les acompaña es artesana, y como todo lo que nos están sacando producida en la zona.
Un buen vaso de zumo de naranja natural (esta vez nos hemos lucido con las fotos, no representan el tamaño real de las cosas). Yogurt natural de Sieso (Sierra de Guara) y café con leche.
Tras el desayuno para chuparse los dedos, nos preparamos y nos vamos a dar una vuelta. Hemos cogido una ruta de wikiloc, de algo menos de 20km..
La ruta empiezan coincidiendo por la famosa ruta de las pasarelas. Es una ruta que te permite ver lo bonito del último tramo del cañón del rio Vero. En verano según nos dicen hay muchísima gente, y hoy también coincidimos con bastantes grupos de gente.
zona con madera en la que si está un poco húmedo hay que andar con cuidado por posibles resbalones.. 😉
Tenemos un día espectacular para disfrutar. Temperatura fresca, pero casi podría decirse veraniega y un solazo que hará que aún podamos disfrutar más de los paisajes.
Dejamos las pasarelas y seguimos con la ruta que hemos descargado
En el camino nos encontramos con unos catalanes con los que estamos un rato de cháchara… y aprovechamos para que nos saquen una foto.. 😉
Bonita vista de Alquezar al fondo
Durante los distintos trozos iremos corriendo/andando según nos parezca. No queremos llegar demasiado tarde a Alquezar de vuelta para poder ir a comer con tiempo, pero casi son las 11 cuando hemos salido y en zonas había bastante gente , así que no nos vale con andar.. 😉
Foto curiosa de perros observadores.. 😉
Construcción a modo de pequeño refugio y panel informativo con mapa de la zona.
Puente de Fuendebaños
La ruta discurre por el cauce del río y según podemos ver en las señales, no es aconsejable para época de lluvias.
Y ahora nos toca subir y subir, con muy bonitas vistas.
Ya arriba, podemos ver al fondo la Colegiata de Alquezar
Balsas de Basacol
Vista de Alquezar, ya sólo nos queda un kilómetro de bajada hasta llegar allí
Esta es la ruta que nos ha salido: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=15114841
Tras una ducha rápida (mira que estábamos de fin de semana de relax, pero algo teníamos que hacer rápido), a pegarnos el atracón. Y así será sin duda.. ¿Veis este menú? Pues no es a elegir, es todo…
Empezamos con la guasa.. Tabla casa Gervasio
Canelones en tempura. Volvemos a decir que las fotos no reflejan el verdadero tamaño del plato. Estos son 3 pedazo canelones rellenos de carne.. a compartir está claro..
La mujer que nos está sirviendo es la que nos ha servido en el desayuno . Majísima. Nos pregunta a ver si queremos un poco de tomate, y …. no puedo evitar decir que si.
¡Riquísimo!
Cazuelas de garbanzos y judias blancas. Tamaño grande, nada de cazuelitas..
Ajoarriero, para cuando nos hemos dado cuenta, la gran mayoría estaba en nuestros estómagos..
Guisado… aquí viene buena. Nos da a elegir entre guisado de cordero o de conejo. Como luego viene un plato de cordero, elegimos conejo. La chica va a la cocina y nos dice que se le ha acabado, así que… elegimos cordero sin realmente importarnos. Está riquísimo…
Pero, según nos ha sacado este plato.. vuelve con otro de conejo, que parece que también les quedaba. Puffaaaaaaaaaaaaaaaaaaa…. Lo que está ahí es un cucharón de sopa (para que veais el tamaño)
y para terminar con los platos principales, cordero. Para chuparse los dedos… aunque bien es cierto que con el estómago más vacio lo hubiera disfrutado más.
De postre, para rematar la faena, elegimos cuajada con miel y nos saca también almendras y coquitos..
¡Puffffffffffffff!!! Todo riquísimo, para nosotros totalmente recomendable. Eso si, preparar el estómago, porque acabaréis llenos…
Pequeña vuelta para bajar algo de la comida…
Preciosas las calles..
y nos vamos a dormir la siesta. Me siento como un oso hibernando… creo que con la comida que acabo de comer soy capaz de pasar el invierno dormida.
Antes de la hora de dormir, salimos a dar una mini-vuelta y tomar algo fresco…
El llamado Pasador de Casa Lailla. Su suelo está tan pulido que se le conoce como la eslizadera, y ha sido utilizado por numerosas generaciones como tobogán.
¡Habrá que probarlo! 😉
Si de día es precioso ¡de noche es encantador!
Hoy cenaremos ligero – ligero para ir a dormir tranquilamente. Un par de yogurts cada uno y va que chuta. Todavía la comida sigue en su proceso de digestión.. ;).
¡Hasta mañana!
Domingo 16 de Octubre No tenemos prisa para nada. Hoy sí que será día de relax y de volver a casa tranquilamente. Disfrutamos del pedazo desayuno y tranquilamente recogemos la mochila y nos vamos del hotel. Casi es la hora de la comida cuando nos vamos a ir de Alquezar… ¿Volvemos al Casa Gervasio? Va a ser que no, hoy toca conducir y no sería prudente . Cada cosa a su tiempo, pero si volvemos por aquí, probable que pasemos de nuevo.
Decimos adios a las bonitas calles..
y ponemos rumbo a casa. En el camino hacemos una pequeña tourne turística, pero poca cosa.
Comemos algo rápido en Boltaña y terminamos el largo viaje turnándonos conduciendo. Capricho de fin de semana que nos hemos pegado. Ahora de vuelta a nuestra preciosa rutina.. 😉